Cuando se piensa en adelgazar o perder grasa corporal, lo primero que la gran la mayoría de la personas hacen es buscar quemadores de grasa, pero solo algunos buscan la dieta y el ejercicio, y por una buena razón.
El exceso de calorías y la inactividad son los dos factores más importantes que impiden que las personas alcancen sus objetivos de pérdida de peso y este hecho se ha convertido en gran medida en un conocimiento común.
Un porcentaje más pequeño pero creciente de personas también se da cuenta de que no es solo la cantidad de calorías, sino también el tipo de calorías que comen lo que afecta su capacidad para adelgazar y mantenerse delgado.
En otras palabras, 100 calorías de pastel afectan el metabolismo de tu cuerpo de manera diferente a 100 calorías de pollo.
Hay otro factor crítico para la pérdida de grasa y mantenerse tonificado que casi nadie entiende y es cómo la SALUD INTESTINAL impacta en la pérdida de grasa y el rendimiento deportivo.
La salud de su intestino tiene un gran impacto en su salud general, inmunidad, estado de ánimo, rendimiento atlético y, especialmente, su capacidad para perder peso.
Entonces, ¿qué es la salud intestinal?
Los mejores quemadores de grasa están en la panza
En primer lugar, cuando me refiero a “panza” no me refiero a una gran barriga que cuelga sobre el cinturón de alguien. A lo que me refiero es a lo que está DENTRO de tu vientre.
El intestino incluye la boca, el esófago, el estómago, el intestino delgado y el intestino grueso. En esta publicación nos centraremos en el estómago y los intestinos delgado y grueso.
Cuando su intestino está saludable, significa que puede comer una dieta saludable sin síntomas de dolor abdominal, acidez estomacal, hinchazón severa u obstrucciones.
Usted es capaz de digerir y absorber el 95-99% de los nutrientes que consume, tiene movimientos intestinales regulares y suaves y su intestino está poblado con la cantidad correcta de flora y bacterias beneficiosas.
Sin embargo, cuando su intestino no es saludable, puede sufrir problemas gastrointestinales obvios como estreñimiento y/o movimientos intestinales irregulares, el problema es que, la mala salud intestinal no siempre es tan obvia.
Aquí hay tres efectos comunes pero menos entendidos de un intestino no saludable:
3 Factores que afectan a los quemadores de grasa en nuestro cuerpo
Depresión afecta a los quemadores de grasa naturales
Estado de ánimo deprimido por la reducción de la dopamina y la serotonina (el intestino se conoce como “el segundo cerebro”, ya que es el segundo mayor poseedor de receptores del químico serotonina que se siente bien, solo detrás del cerebro).
Cuando su serotonina es baja, lo siente en su cerebro Y en su intestino. Esta podría ser la razón por la que enamorarse nos da mariposas o por qué la depresión tiene un efecto increíble en cómo se siente nuestro estómago.
Inflamaciones crónicas disminuye el sistema de quemadores de grasa
Inflamación crónica (sistémica), que contribuye a todo, desde alergias hasta trastornos autoinmunes y dolor en las articulaciones
Absorción de nutrientes reducida
Nuestro cuerpo basado en su estado natural, puede tener una capacidad alta o baja de la absorción de alimentos que por naturaleza bioquímica se convierten en exelentes quemadores de grasa.
Enfoquémonos ahora en cómo esto puede afectar sus labores como quemadores de grasa.
Quemadores de grasa naturales
Serotonina
Es bien sabido que los niveles bajos de serotonina aumentan los antojos de los alimentos que nos dan un impulso a corto plazo de dopamina y serotonina, es decir, carbohidratos y azúcares procesados.
Si sus niveles de dopamina y serotonina están bajos, es mucho más probable que coma estos alimentos, saboteando sus objetivos de acondicionamiento físico en el proceso.
Comer carbohidratos y azúcares procesados le da un empujón en estos “químicos para sentirse bien”, pero este empujón es de corta duración.
Es por eso que el azúcar es tan altamente adictivo. Comes un poco de azúcar para satisfacer tus antojos, tus niveles de dopamina y serotonina aumentan, pero poco después bajan y comienzas a experimentar otro antojo, a menudo progresivamente peor.
Esto explica por qué la eliminación del azúcar de la dieta suele dar lugar a un período de abstinencia. Cuando eliminas el azúcar, tu cerebro produce menos de esos químicos que te hacen sentir bien, lo que te deja con la sensación de que falta algo.
La buena noticia es que estos sentimientos disminuirán a medida que su cuerpo se normalice. De hecho, las personas a menudo comentan que ya no anhelan los azúcares o que las frutas y los alimentos que naturalmente contienen algo de azúcar de repente saben mucho más dulces.
3 Alimentos que ayudan a incrementar la serotonina en nuestro cuerpo
Huevos
Los huevos están repletas de varios antioxidantes y aminoácidos, incluidos los ácidos grasos omega-3, la biotina, la colina, la tirosina y el triptófano (es decir, el precursor de la serotonina).
Para limitar la ingesta de colesterol, considere comer huevos duros en lugar de fritos. Y recuerda combinar los huevos con un carbohidrato complementario como la avena.
Bananos
Según la Fundación Nacional del Sueño, debes comer al menos medio banano antes de acostarte. Esta recomendación se basa en el contenido de triptófano de la fruta. Y como ya tiene carbohidratos, ni siquiera necesita acompañamiento.
También se beneficia del alto contenido de potasio por el que son conocidos.
Piña
La piña es una fruta tropical tan saludable como deliciosa. Está repleto de toneladas de compuestos útiles, como antioxidantes, nutrientes y enzimas. Con respecto a esto último, las piñas contienen una enzima conocida como bromelina, que ayuda a reducir la inflamación y aumenta la inmunidad.
Sistema inmunológico.
La inflamación en sí es una respuesta natural del sistema inmunitario. Por ejemplo, cuando se resfría o se tuerce un tobillo, el sistema inmunitario de su cuerpo entra en acción para repararse y recuperarse.
El calor, el dolor, el enrojecimiento y la hinchazón son respuestas inflamatorias diseñadas para iniciar el proceso de curación. A medida que su cuerpo se cura, los compuestos antiinflamatorios actúan para neutralizar la respuesta inflamatoria, devolviendo su cuerpo al equilibrio.
En los casos en que la inflamación no disminuye, es una indicación de que su sistema inmunológico está en alerta máxima. Esto se conoce como inflamación crónica. Con el tiempo, este estado perpetuamente inflamado tiene un efecto muy perjudicial en su cuerpo.
La inflamación crónica ahora está relacionada con ataques cardíacos, enfermedades como la enfermedad de Crohn, el asma, la osteoartritis, el Alzheimer e incluso la diabetes tipo 2.
Dos tercios de las defensas inmunitarias de su cuerpo residen en su intestino y la mala salud intestinal es la zona cero de la inflamación crónica. Así que hablemos de cómo la inflamación crónica afecta la pérdida de grasa.
Su cuerpo produce una hormona maestra de control de peso llamada leptina, que es responsable de regular la cantidad de grasa almacenada en su cuerpo.
Cuando estás sano, la leptina actúa para mantener tu peso en un nivel óptimo ajustando tu gasto de energía y enviando una señal a tu cerebro para que dejes de comer cuando el nivel de grasa en tus células alcance cierto nivel.
Con la inflamación crónica, su cuerpo produce químicos antiinflamatorios que interfieren con la función de la leptina. Cuando se suprime la señal de leptina, su cuerpo no ajusta su gasto de energía y su cerebro no recibe la señal de que está lleno.
El resultado es un metabolismo lento y comer en exceso, lo que conduce a un rápido aumento de peso y hace que la pérdida de grasa parezca casi imposible. Para empeorar las cosas, cuanta más grasa ganes, más inflamación producirás, lo que hará que tu leptina sea aún menos efectiva.
3 Alimentos para fortalecer el sistema inmunológico
Ajo
Es saludable por distintas razones. Antiguamente se usaba para combatir las infecciones, porque es un eficaz anti-bacteriano y anti-viral y anti-fúngico. Hace disminuir la presión sanguínea y retarda el endurecimiento de las arterias. Las propiedades inmunológicas del ajo se deben a su considerable concentración de compuestos de sulfuro como la alicina. Previene los resfriados y combate la fiebre.
Chocolate Negro
Su secreto es la teobromina, que protege a los glóbulos blancos de los radicales libres. Estos son moléculas que el cuerpo produce al descomponer los alimentos que ingerimos o cuando entra en contacto con contaminantes y que contribuyen a que desarrollemos enfermedades. De todas formas no conviene pasarse de dosis, porque tiene muchas calorías y grasas saturadas.
Gengibre
Es uno de los nutrientes a los que los orientales recurren cuando están enfermos. Combate inflamaciones, como las de garganta, y también es un paliativo contra las náuseas. Su regusto picante se debe al gingerol, un pariente de la capsaicina (que es lo que provoca que determinados pimientos piquen), que reduce los dolores crónicos. Tiene propiedades que combaten el colesterol, según reciente estudios realizados con animales.
Flora Intestinal
Finalmente, hablemos de la “flora intestinal” que constituye gran parte de su intestino. La flora intestinal se refiere a los microorganismos y bacterias que viven naturalmente en su intestino.
Se ha encontrado en numerosos estudios que la flora intestinal de las personas obesas y poco saludables es fundamentalmente diferente de la de las personas delgadas y sanas.
Las bacterias en su intestino son en gran parte responsables de cómo se absorben los nutrientes y cuando el equilibrio no es óptimo, no utiliza los nutrientes tan bien.
Esta falta de absorción de nutrientes puede desencadenar fácilmente los antojos a medida que el cuerpo acelera el hambre en busca de más nutrientes.
Esta es la razón por la que una dieta alta en calorías y baja en nutrientes muchas veces puede provocar más hambre. El cuerpo está recibiendo las calorías pero se pregunta dónde están los nutrientes.
Entonces, ¿cómo comemos y complementamos nuestras dietas para promover un intestino saludable? En primer lugar, limite o elimine el azúcar de su dieta. El azúcar alimenta ciertas bacterias dañinas y una dieta alta en azúcar causará un crecimiento excesivo de estas bacterias, lo que resultará en una salud intestinal subóptima.
Siempre recomiendo a mis clientes que limiten el azúcar en su comida posterior al entrenamiento., es entonces cuando el azúcar es beneficioso, ya que puede ayudar en el proceso de recuperación muscular.
Aparte de después del entrenamiento, el azúcar realmente no es bueno para ti en ningún otro momento. A continuación, asegúrese de incluir alimentos naturales que contengan bacterias beneficiosas vivas.
Los alimentos fermentados como el yogur natural, el kéfir, el chucrut y el té de kombucha están llenos de bacterias saludables. También puede complementar con un probiótico para reforzar y mantener niveles saludables de bacterias buenas.
Evite los alimentos procesados y envasados y los edulcorantes artificiales ya que se ha demostrado que contribuyen a la flora intestinal no saludable. Se ha demostrado que ciertas grasas tienen efectos calmantes en el intestino y también contribuyen a una flora saludable.
El aceite de coco, el aceite de oliva y los aceites de pescado son buenas opciones.
Finalmente, haga y consuma sopas de caldo de huesos con regularidad. Son ricos en proteínas de colágeno. Estas proteínas ayudan a sanar el intestino porque proporcionan los componentes básicos para el revestimiento del intestino.
Haga de la salud intestinal una de sus prioridades en su dieta y obtenga los beneficios de niveles más bajos de inflamación, una mejor producción y utilización de los químicos serotonina y dopamina que se sienten bien, una mejor absorción de nutrientes, mucho menos antojos y vea cuánto más fácil es perder grasa.
Posiblemente, este podría ser el único factor que te impide alcanzar tus objetivos de pérdida de grasa.
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